Nene, hablemos claro. Tienes el deseo de servir mediante la mediumnidad. Sientes la conexión, percibes la energía, sabes que hay algo más grande y que puedes ser un puente para la sanación. Pero hay días en los que dar una lectura se siente como ir a un examen para el que no estudiaste: te sudan las manos, te paralizas y terminas más agotado que si hubieras corrido un maratón.

Si te suena, no estás solo. Esos son los saboteadores del ego, los bloqueos que se meten en el camino de todo médium. Después de una sesión brutalmente honesta en mi Círculo de Desarrollo, identificamos los 3 más cabrones. Y lo mejor de todo, encontramos la solución para cada uno.

Bloqueo #1: El Agotamiento Post-Sesión ("Terminé Drenado")

Esta es la señal más clara de todas. Si terminas una sesión sintiéndote vacío, cansado o con dolor de cabeza, la respuesta es simple: hiciste tú toda la chamba. Operaste desde tu energía psíquica, desde tu mente, desde el esfuerzo de "adivinar" o "sacar" la información.

La Solución: ¡Suéltalo carajo! Recuerda que "médium" significa "puente". Un puente no carga el peso de los carros, solo les permite pasar. Una conexión mediúmnistica pura, con el alma del ser trascendido, SIEMPRE te deja energizado, elevado. Si te cansas, es tu ego metiendo su cuchara. La próxima vez, antes de empezar, respira y di: "Yo soy solo el canal. El trabajo es de ustedes".

Bloqueo #2: El Miedo al Escéptico ("Me Pone a Prueba y me Bloqueo")

Te toca un cliente con los brazos cruzados, cara de pocos amigos y una energía de "a ver, demuéstrame". Inmediatamente, tu ego salta: "¡Tengo que convencerlo! ¡Tengo que darle una evidencia tan cabrona que se cague!". Y en ese momento, ya perdiste. La presión te bloquea y la conexión se va al carajo.

La Solución: Tu trabajo no es convencer a nadie. Punto. Deja que el mundo espiritual haga sus propias relaciones públicas. Tu única misión es crear un contenedor de confianza. Habla con la persona, explícale el proceso, hazla sentir segura. Y si la energía de escepticismo persiste, aplica el "golpe de fe": ríndete. Entrégale la sesión a tus guías y confía. Si la conexión no se da, no es tu fracaso; simplemente no era el momento o la persona. No tienes nada que probar.

Bloqueo #3: La Duda en la Evidencia ("Siento que es muy general" o "Estoy inventando")

Empiezas a recibir imágenes o sensaciones que te parecen "genéricas": una caricia en el pelo, una abuela cocinando, la sensación de que acompañan a la persona al dormir. Y la voz de la duda ataca: "Eso es muy obvio", "Seguro me lo estoy inventando", "Esto no es una evidencia 'wow'".

La Solución: ¡Felicidades, estás conociendo tu Alfabeto Mediúmnistico! El mundo espiritual usa TU biblioteca de referencias para comunicarse. Esas imágenes repetitivas son tu lenguaje único con ellos. No las descartes, ¡entrégalas! Di: "Estoy percibiendo una caricia en el cabello, ¿qué significa esto para ti?". A menudo, esa imagen "general" es la llave que abre la puerta a una historia profundamente personal y a una evidencia innegable para tu cliente.

La GRAN solución de todo Médium

La solución universal para estos tres bloqueos, la práctica no negociable que lo sostiene todo, es una: Siéntate en tu poder. Todos los días. Conectar con tu propia energía y la de tu guía es el entrenamiento en el gimnasio del alma. Fortalece el músculo de la confianza hasta que la voz de tu ego se escuche como un susurro lejano y la de tu alma resuene con la fuerza de un puto trueno.